Escura. Abogados y Economistas

Consulte el PDF

Como ya comentamos en la circular 134/19, en las últimas semanas hemos detectado un incremento de los avisos de nuestros clientes que han recibido un ciberataque.

A continuación, les damos una serie de recomendaciones o claves para reconocer si el correo que nos han enviado, que aparentemente es legítimo, puede estar infectado con un virus. Un ejemplo típico, sería la recepción de un email solicitando el pago de una factura.

Por lo general, los emails maliciosos o que contienen un virus, llevan consigo un archivo adjunto ya de por sí sospechoso por su formato. El texto del email suele ser de pocas líneas y tal como decíamos, es muy común que en el mismo se solicite el pago de una factura.

¿Qué debemos hacer?

En primer lugar, debemos verificar si el emisor del correo y la dirección electrónica concuerdan. Si no concuerdan, ya tenemos una pista clara de que se trata de un posible virus del tipo phishing.
Si sospechamos del correo, del archivo adjunto en formato Word o en cualquier otro formato, no debemos abrirlo en ningún caso.
El cuerpo del mail puede hacer pensar que es un correo normal. Incluso puede estar firmado por alguien que conocemos. Pero siempre suelen ser textos breves y solicitando el pago de una factura o directamente que abramos el documento adjunto.
En caso de sospecha, antes de realizar cualquier acción respecto al mail recibido, es recomendable contactar con el remitente “original”, si es que le conocemos. Puede bastar con el simple envío de un mail por nuestra parte y esperar su respuesta confirmando si nos ha enviado o no ese mail.
Si aun así no ha podido determinar si se trata de un correo legítimo o malicioso, contacte con su servicio informático para que le asesore al respecto.